viernes, 26 de octubre de 2018

POR SI ACASO, NO USES LA LÓGICA


Razonar y expresarse con cierta lógica – aunque sea elemental y rudimentaria – te genera serios problemas para comunicarte. Eso ocurre cada vez con más frecuencia. La dificultad ya es diaria y a veces se verifica por horas. La lógica de Aristóteles, el razonamiento elemental y descriptivo, de lo que la comprensión y el ojo humano ve, ya es historia.
La mayoría de las personas, tienen ahora una frecuencia única, indescriptible e indescifrable. Es tal su complejidad, que a veces ni ellos mismos la entienden. Por eso hay tanta gente en el mundo peleando consigo mismo. Discutiendo y contradiciendo sus propias afirmaciones. Todo ocurre en una frecuencia de tiempo muy corta. No hay involución ni evolución del pensamiento. No pudo haber tiempo para tanta contradicción. Se trata, sin duda, de una alteración del pensamiento. Explicaciones científicas no faltan y no siempre responden a la lógica.  
Visto así, es más sencillo comprender por qué hay momentos en que las diferencias de frecuencia, generan tanto ruido y descargas. Parece que un shock eléctrico va a producir una explosión entre los que están hablando. Vivimos asombrados por el denso aire de la locura cotidiana que nos impone las disrupciones del pensamiento general. 
Por eso, siempre es conveniente intentar primero el uso de las miradas. A veces la conjunción de la línea imaginaria cruzada entre los iris significa casi todo. Otras veces la gestualidad ayuda al entendimiento. Y en algunas ocasiones – aunque rara vez -  la palabra confirma el “encuentro” entre dos o más personas. Pero a veces no funciona así.
Si es una mujer, cualquier sea el grado de belleza, entonces es una tentación que no trae dificultad. Pero hay quienes se complican sin necesidad. Se impone al aspecto libidinoso y exuberante. Al final todo confluye con la expresión: “nos  vemos en la red”. Aquí es donde aparece el componente idiota de la condición animal y hace saltar cualquier lógica.
Si es un hombre, entonces ya se sabe. La primera mirada es para determinar quién es más  más alto, más lindo, más fuerte, más inteligente. La segunda mirada es para ver de qué se trata. Luego ya no hay diálogo porque se impone el sentido imperioso de arrastrar al otro en su dirección. En estos casos se impone la parte más imbécil del instinto animal.
Cualquiera sea el método y las circunstancias, no hay que confundir – mucho menos olvidar  - que  “Comunicar” no es el verbo de nuestro tiempo. “Comunicarse” es algo inexistente. Es una expresión hueca, vaciada y desautorizada por el nuevo paradigma de la tecnología de la comunicación.  Los verbos son Mostrar, Demostrar, Exponer, Ofrecer y Entregar.  El esquema de relaciones es algo parecido a  “Hacer de cuenta que…”, “Vivamos algo parecido a…”.
Combinar la auténtica realidad con las diferentes versiones, en las que vive la mayoría de la gente, es una tarea muy compleja. El  paradigma indica que se vive a un ritmo vivaz, tecnológico, moderno, dinámico, descontracturado y líquido que se derrama en un sinfín de ideas “felices”, que suelen no conducir a ninguna parte. Solo indican el camino para que pasen las horas en las mejores condiciones hedonistas. Único remedio para la ansiedad que produce este mundo líquido, vivaz, moderno, hiperactivo y progresivo en la funcionalidad que le toca ejercer a cada individuo.
En esos contextos, por si acaso, no conviene usar la lógica. No te servirá de nada. Ningún elemento del sinfín de ideas “felices” mantiene alguna relación con la lógica.
Hoy es 26 de octubre de  una primavera nublada. Y como es viernes,  he pensado antes de salir de casa en un par de cosas. Es un día de adrenalina (a veces de la buena, a veces de la que se ofrece en las ofertas, a veces de la que se presta por un día) en donde hay mucho improvisado queriendo ser un normal. Y también hay mucho reprimido queriendo ser un desatado. Todos esos volverán a ser “Otros” el día lunes. Y quizá unos “Nadies” en el mundo de la Red. Serán “Otros Nadies”. Pero no le busques la lógica, porque no se la vas a encontrar. Forma parte del paradigma. Es solo un ejemplo de la alteración constante y persistente del pensamiento y el sentimiento.



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Imagen de Levalet (Charles Leval) Street Art , París, Febrero de 2017.  

lunes, 22 de octubre de 2018

PIENSO, CONOZCO, LUEGO RECONOZCO


Que el futuro me pille confesado
Reconocimiento 1
Tengo que agradecer a todos los chicos lindos, hombres fuertes, tipos con destrezas, señores con solvencia, individuos con influencias y demás hombres destacados por su belleza o patrimonio.
Gracias a todos ellos, me dediqué a escribir, perfeccionar mi estilo, ensayar otras formas de comunicarme y cultivar algo así como “el verbo florido”. Todas esas artes menores y canallas, me han salvado de los desiertos afectivos. Esas destrezas vilipendiadas en el universo del Sentido Común, soslayadas por los administradores del espíritu de los hombres, condenadas a viva voz en nombre del progreso material, me han dado de comer.
El sentido inverso del espejo resultó productivo. Aprendí todo lo que no quería ser. Crecí en cada condena. Me hice mejor persona en cada sentencia. Hasta que un día me proclamé orgullosamente desigual, al margen de la  norma. Y así voy por la vida, con mucho más futuro que todos aquellos que compraron futuro al peso, por encargo o bajo receta.
Reconocimiento 2
No pretendo grandes cosas del mundo social que me rodea. Tanto el real como el virtual, que últimamente tiene más gravitación que el primero. Solo quiero que me tengan en cuenta y hago esfuerzos para no pasar desapercibido. Esto lo logro en los sitios donde no me importa tanto y fracaso estrepitosamente – una y otra vez – donde sí me interesa. Tal vez  ahí radiquen mis pequeños éxitos. Logros que suceden a pesar mío. Hay gente a la que no le merezco ni un segundo de observación. Me gustaría que fuera diferente, pero tal vez sea su “inteligencia” la que me envía un mensaje subliminal: no pierdas el tiempo con nosotros. A veces pienso que quizá sea así, entonces me distraigo con otras cosas.
Todo eso ha sido una constante en mi vida. Ya lo he naturalizado. No me da sobresaltos.
En todo caso, creo necesario dejar claro que no pretendo ni pretendí ser lindo, guapo, seductor o personaje con atributos irresistibles. Debo reconocer que varias veces lo  intenté y volví a intentar. Pero ya no lo hago más. Porque si en todos estos años, no lo he conseguido, debe ser porque la tarea es imposible o no tengo talento para eso. De todos modos, reconozco el esfuerzo que hacen los amigos por ver atributos en mi persona y mi figura que no atino a descubrir. Cosas que ya no me detengo en analizar. Temo que la conclusión sea que mis amigos también tienen alguna alteración que no puedo descubrir.
En fin… generosidad de alguna gente, que es de agradecer. Y no es necesario preguntar por qué.    
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San Telmo, 29 de junio de 2017

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Imagen: Obra del pintor polaco Igor Morski.

jueves, 18 de octubre de 2018

LA ESTACA CULTURAL


Me gusta hablar de la cultura en sentido antropológico. Pero detesto los debates en los medios que tengan a la cultura como objeto. Me gustan las tertulias desinhibidas entre amigos, donde la cultura pueda ser parte de la charla, pero detesto las tertulias programadas que tengan a la cultura como punto excluyente.
No se habla de cultura. Parece que se habla de cultura, cuando en realidad se habla de estereotipos y clichés, que sirven como estacas para marcar los estamentos sociales y sus comportamientos morales dentro de una sociedad. No se habla de cultura. Se expone erudición y enciclopedismo. Ambas cosas permiten a los participantes mantener breves combates dialécticos, que concluirán cuando una de las partes reconozca que la otra sabe más. Es así como en determinados círculos, surgen campeones de la tertulia cultural enciclopédica.
En demasiados casos se utiliza a la obra de arte como cuña, para diferenciar los niveles socioculturales de las personas. A mayor conocimiento, más alto es el lugar que se ocupa. Pareciera que cierto tipo de reuniones culturales estuvieran organizadas ex profeso. Porque no es la cultura lo que se persigue clarificar o recortar del conjunto de la realidad social para su análisis y mejor comprensión. Aunque son  abundantes en conceptos y exposiciones, no es lo cultural y su mayor o menor conocimiento lo que se persigue en esos debates. Solo se pretende marcar y destacar el lugar en la escala social que ocupa tal o cual persona.
El arte y sus manifestaciones se han desnaturalizado en su deriva moralizante, que indica el mayor o menor grado de evolución en la escala social. Se trata de una argucia de quienes ejercen poder dentro de esa sociedad. La diferencia la marca la evolución, el pensamiento, el conocimiento, y no el dinero o la propiedad material.  Pero también hay quienes hacen méritos para formar parte de ese círculo. Son los eruditos, solventes auxiliares de la propiedad. Son esos personajes que, si no tienen solvencia ni pueden conseguirla en lo que les queda de vida, entonces preparan su erudición enciclopédica para acceder al “Olimpo” del selecto grupo de privilegios.
En suma… Es una estrategia para marcar diferencias, estigmatizar al otro y verse a sí mismo como superior, en un escalón donde la palabra “Arriba” significa “Superior” en la evolución humana. En suma… Es una estrategia de la mezquindad. Es un abalorio social que utilizan los que nunca podrán comprender la profundidad del alma humana. Ahí donde se fabrica la cultura.
 San Telmo, 13 de enero de 2018.


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Imagen de autor desconocido tomada de Pinterest

martes, 16 de octubre de 2018

PÁJAROS DE ESPÍRITU LIBRE


Los pájaros son los únicos animales que el hombre no ha podido domesticar. Solo le han quedado las opciones de matarlos o encerrarlos. Ha domesticado los animales más grandes (por caso, los elefantes o las orcas) los más salvajes e irascibles (tigres, leones, serpientes) y los más mansos. También ha creado variedades de especies existentes (por caso, las ovejas, los vacunos, el caballo, el perro). Pero nunca ha podido con los pájaros. Son los animales de instinto libre, imposible de contener, capaces de quitarse la vida en el encierro a fuerza de golpearse en los barrotes de la jaula, como lo hace el gorrión.
Los pájaros son la única especie que el hombre ha querido imitar y no ha podido. Ha necesitado de artilugios, construcciones complejas, a veces enormes, que le permiten volar pero nunca como un pájaro libre. Los pájaros son los únicos que han desafiado con éxito los antojos, ocurrencias, necesidades y caprichos de los hombres. Los pájaros se han mostrado invencibles en su espíritu libre, que solo en la muerte son capaces de entregar. 


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Imagen de Christian Schloe (arte digital)

viernes, 5 de octubre de 2018

PENSAR O NO PENSAR. ESA ES LA CUESTIÓN


¿La gente elige o es elegida por las circunstancias?
¿La gente dispone o es dispuesta o es disponible?
Dice un señor llamado David Foster Wallace que " Aprender a pensar en realidad significa aprender a desarrollar cierto control sobre " cómo " y "qué" se piensa. Significa ser consciente y estar lo suficientemente atento como para " elegir" a qué cosas prestar atención y " elegir " cómo uno construye significado a partir de la experiencia". Tiene lógica la idea. Pero hace falta una decisión y capacidad de adaptación.
Pero tengo otra curiosidad que quizá tenga que ver con las preguntas del comienzo: ¿Pensamos o no pensamos?
Tal vez nunca pensamos o pensamos de a ratos o no nos damos cuenta que pensamos o no queremos pensar. Si no pensamos, entonces solo nos desplazamos en una sucesión de ficciones que pensamos que son nuestras utopías. Quizá sean impresiones del sentimiento. Golpes sucesivos de emociones que nos indican caminos posibles. Pero nosotros pensamos que pensamos.
¿Por qué pensar es tener ideas lógicas? Si es por eso yo nunca he pensado y juraría que hay miles de personas a las que les ha pasado lo mismo. Tengo un par de amigos sobre los que puedo afirmar – sin dudas – que ellos no pensaron nunca. ¿O tal vez sea al revés? Los dislocados que van en contra del sentido común (o el supuesto sentido lógico de los hechos y las cosas) son  los que piensan.
Porque en ciertas ocasiones hay que tener alguna estrategia para ir en contra del sentido común. Conozco gente que ha quedado tiritando por eso… ¿Esos no piensan? Porque es la acusación que reciben en todos los foros que conozco. Pero es muy posible que sean ellos los que piensan. No digo “Pensar a su modo”. Digo “Pensar”. Porque para ir en contra de algo hace falta tener una idea, un lugar o una causa que alcanzar. Y a veces, para lograrlo, hace falta eso que califican como No Pensar o Pensar Distinto o Pensar en Contra o Pensar A Pesar De.
Tengo la impresión de que es así como se empieza a pensar. Son como revoluciones incruentas en el interior profundo de unos mismo. Breves revoluciones diarias que nos mantienen en vilo y sostienen el instinto de  transformación. Rebeliones cotidianas que después de muchas luchas puede resultar  una superación,  aunque no se sepa muy bien qué es esa idea.
Luego vienen las normas y la lógica y la razón y todas esas cosas. Pero eso ya no es pensar. Solo es algo parecido a pensar. 

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River Walk of Carl Schurz Park, Photo by André Kertész, 1948

miércoles, 3 de octubre de 2018

QUIERO QUE ME TENGAN EN CUENTA.


(Declaración elemental de un hombre cualquiera)

No quiero que me adulen, que me consideren un líder (seguramente innecesario), que me cuelguen la camisa de conductor o guía, que me sumen como un fogonero o que se acuerden de mí cuando no tienen nada que hacer o su ocio se convirtió en hastío.

Tampoco me desespera que a veces no me escuchen ni presten atención a los comentarios banales que pueda hacer o a la exposición concisa de alguna idea que merecería una demostración más exhaustiva. Pero me angustia cuando los reclamos genuinos son escuchados como si se tratara de letanías de otro tiempo, como si las necesidades del alma o la vida material no fueran necesarias para la vida.

Lo único que pretendo es que me tengan en cuenta, que sepan que estoy, que no soy un número, muchos menos un cero, que camino y dejo huella, que hablo y digo pensamiento, que respiro y entrego vida, que merodeo la naturaleza como si fuera una parte – a veces me integro en ella y a veces la maltrato – y que voy por el mundo con una ilusión: salir de la estadística y que nos miremos de frente, todos juntos, para caminar mejor, hacia un futuro que nadie conoce pero que debemos construir y que depende – irremediablemente – de nosotros mismos.

(4 de febrero de 2015)

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Imagen tomada de Pinterest

lunes, 1 de octubre de 2018

LOS IGNORANTES AL PODER. LOS DEMÁS A REFUGIARSE


Cuando un ignorante se hace con el poder para decidir sobre las vidas de los demás, se convierte en un indecente y un inmoral.
En esos casos ya no es un ignorante, es un ambicioso holgazán que ha tomado el camino de las ventajas solapadas  de las venias, genuflexión y prebendas de los dominantes. Se ha pegado como lapa a los poderosos. Su objetivo es subir los peldaños de un sistema corrupto a base de exprimir su vida hasta la decadencia personal.
Persigue el perfume penetrante del poder hasta saturar su respiración. Quiere ser un igual en el estrecho cielo de los que mandan y deciden. Se prepara cuidadosamente en los modos de conducirse y perversidades varias. Se convierte en un maestro del doble lenguaje. Su única virtud es no tener virtud.
Las democracias occidentales modernas, para nuestra desgracia y muy a pesar nuestro, están llenas de estos personajes. Controlan países, dirigen ejércitos, ocupan altos cargos en todo tipo de instituciones, pero nunca tienen el suficiente poder como para manejar los centros financieros. Ese lugar les está vedado, aunque ellos se contentan con ser los primeros en la puerta de los ocultos despachos.    
Esos ignorantes que ya no son ignorantes, manejan nuestro mundo de hoy. En la letra del tango “Cambalache”, Enrique Santos Discépolo escribe: “(… ) LOS IGNORANTES NOS HAN IGUALAO (…)”. Pero eso fue hace tiempo, en 1934. Ahora nos controlan.
Mire usted su país, mire dentro de él, revise la lista de los que mandan y dígase a sí mismo, cuántos personajes de este tipo tiene en la canasta.
Por lo demás, conviene decir que un ignorante no es el que no sabe o carece  de conocimientos en cualquier disciplina. Es el que no quiere aprender, porque eligió otro camino para pasar por este mundo haciendo daño. 
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Imagen: André Kertész. Place de la Concorde, París, 1928.