Hay cosas que los hombres, un hombre, cualquier hombre,
Llevará toda su vida.
Esas cosas que llevará toda su vida, no las elige él.
Esas cosas lo eligen
a él.
En mi caso, tú eres ese amor que llevaré toda la vida.
Porque a ti te llevaré toda la vida.
No sé cómo pasó. No sé por qué paso… O sí sé por qué.
En cualquier caso es así. Será así, quiero que sea así,
necesito que sea así.
Hay algo que pasó. Ocurrió…
Eso me marcó. ¡Cómo me marcó!
Eso que llevo, lleva tú nombre. Y no sé dónde lo llevo.
¿O sí sé dónde lo llevo…?
No importa, porque eso que llevo, lleva tu nombre
Eso que llevo… Que se parece a un arco iris.
A la brisa que sucede
a una tormenta.
A eso que llevo… que percibo como un nacimiento.
A eso que llevo… Como
una luz multicolor
Lo amo, lo sufro, los disfruto, lo padezco, lo quiero, lo
tengo, lo cuido, lo protejo...
Y no quiero que se vaya nunca.
Nunca.
©
César Manuel Sarmiento
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San
Telmo, 20 de julio de 2017
