Hoy quisiera
cruzarme con una mujer que no conociera, que no hubiera visto nunca en mi vida
ni que tuviéramos en común gente
conocida o entornos sociales parecidos. Hoy quisiera cruzarme con una mujer
así. Y que tuviéramos una similar curiosidad. No es delirio, suele suceder y me
consta que a veces ha sucedido.
Hoy tengo ganas
de poner la curiosidad a toda máquina. Llamar a mis sentidos y decirles que hay
trabajo extra. Convocar a mi percepción y contarle que es necesario que se
esmere al máximo.
Hoy tengo ganas
de tener uno de esos combates entre reales y ficticios, donde hay que poner
todo en juego. Hoy tengo ganas de cruzarme con una mujer que me convoque a la
lucha de palabras, que me desafíe con afirmaciones y metáforas, que avance
sobre mis ideas y decida los planos mentales y emocionales en los que nos vamos
a encontrar.
Hoy tengo ganas
de cruzarme con una mujer que dude igual que yo. Pero que se largue en el juego
de diálogo y el pensamiento, que avance y avancemos en la erótica de las expresiones,
miradas y palabras, que traduzca y
reciba el doble viaje de emociones, sentimientos y expresiones que tiene el
sexo que no es explícito
Hoy tengo ganas
de cruzarme con una mujer así. Sé que es posible. Hacer el amor sin tocarse,
debe ser una de las experiencias más apabullantes que se puedan conocer. Lo es
más si sucede con una mujer que nunca viste en tu vida y te cruzaste por azar.
Lo del cuerpo, si viene luego (y es probable que suceda) es lo de menos. Será
solo un premio consuelo para el cuerpo, después de haber aguantado tanta
tensión.
***
Imagen de autor desconocido (lamentablemente). Se ruega colaborar si se conoce la autoría.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por venir y dejar tu marca